HEMEROTECA | Kiko Hervás, un cambio de estrategia clave y un tropiezo inoportuno en Londres

Dos Juegos Olímpicos a sus espaldas y muchas batallas a mar, a pantano y a lago abiertos libradas. Francisco Hervás es uno de los nadadores de aguas abiertas españoles más destacados de nuestra historia. En su dilatada trayectoria el catalán, actualmente afincado en Villarreal, donde creó y es el presidente del club Vilaswim, ha pasado por todo tipo de momentos y vivencias, incluida una fatalidad en los Juegos de Londres que le apartó de luchar por un diploma olímpico que veía más cerca que nunca. De esa anécdota y de muchas más hablamos con él en un nuevo apartado de nuestra 'Hemeroteca'. 

SHANGAI'11, UN MUNDIAL PARA EL RECUERDO

Empezaremos por el final, contra la 'lógica'. Curiosamente si echamos un vistazo al palmarés y resultados de Kiko no deja de ser sorprendente que viviera uno de sus mejores campeonatos ya hacia el ocaso de su carrera. Shangai'11 fue un Mundial especial para el catalán, que acabó sexto y logró el billete olímpico en los 10 kilómetros y se quedó a dos segundos del podio (cuarto) en los 25 kilómetros. "Fue un año supermalo, lleno de lesiones. No me lo esperaba y quedé sexto en el 10 (el gran objetivo porque me daba la plaza olímpica); tuve muchas molestias, en el Campeonato de España previo de junio no pude ni participar. Pero me puse las pilas ese último mes y la verdad que creo que ha sido mi mejor campeonato". 

Se quedó más cerca que nunca de una medalla mundialista: "Sinceramente me tiré a los 25 kilómetros casi por completar, yo preparaba el 10. No preparé nada. Lo que sucedió es que el agua estaba muy caliente, el calor era asfixiante y hubo muchas retiradas. Yo estaba acostumbrado a entrenar en el CAR con el agua muy caliente porque allí también entrenaban las chicas de sincro, así que me vino genial. Quedé cuarto y no sé si es adecuado que lo diga pero el ruso que finalizó segundo al cabo de un año le sancionaron por dopaje. No quiere decir que en ese momento fuera dopado, pero la sombra de la sospecha ya está ahí". 

EL TROPIEZO MÁS INOPORTUNO

Con pasaporte para los Juegos de Londres, Kiko llegaba a la cita en la capital británica en el mejor momento de su carrera prácticamente. "Estaba preparado y en condiciones para quedar entre los ocho primeros y hacer diploma". Pero entonces ocurrió una fatalidad: "Teníamos una entrevista con Érika Villaécija fuera de la villa con una periodista y me rompí el quinto metatarso del pie pisando mal un bordillo; quedaban tres días para la prueba y apenas pude nadar hasta el gran día. Me tuve que infiltrar para competir, nadé con el pie negro del derrame, un desastre". Pudo acabar y finalizó en 23ª posición. 

Después del sinsabor en Londres todo cambió para Kiko, que enlazó problemas físicos y no pudo despedirse en el Mundial de Barcelona, en casa, como hubiera deseado. "Estuve como Jefe de Equipo y pude vivirlo desde otra perspectiva". 

JUGÁRTELA CONTRA UN AMIGO

Antes, en Pekín'08, Kiko pudo experimentar a sus 27 años un sueño de infancia hecho realidad. "En un deporte minoritario como la natación es a lo máximo que aspiras. La clasificación no fue nada fácil porque tenía como rival a Diego Nogueira. En la repesca clasifiqué yo por tres décimas. Antes, en el Campeonato del Mundo de Sevilla, que fue unos meses atrás, me descalificaron porque en la última recta nos golpeamos con Grant Hackett, 'recordman' mundial de los 1.500. Como ningún español nos clasificamos fuimos a la repesca el mes siguiente. Había 15 plazas, pero solo una por país". 

Una situación durísima porque Kiko y Diego eran (y son) grandes amigos. "Clasificar uno de los dos era relativamente fácil, pero claro, era un mano a mano. Fue muy 'chungo'. Creo que dimos una muy buena imagen de cómo llevarlo. Los dos brasileños estaban peleados, ni se hablaban, los dos checos igual. Los dos lo teníamos muy claro, incluso dormíamos en la misma habitación. Clasifiqué yo y seguimos siendo amigos, él vino a mi boda y yo fui a la suya". 

LOS INICIOS Y EL CAMBIO DE ESTRATEGIA

¿Como se inició Hervás en esto de las aguas abiertas? "Yo hacía piscina y ahí nadaba pruebas de fondo. Cuando tenía 20 años mi entrenador del club nos dijo de probar en un campeonato de aguas abiertas. Creo que fue Alicante '01, me gustó, luego volví a participar. Me clasifiqué para una Copa de Europa y me enganché. Hice el circuito de Copas de Europa, en 2004 participé en el Europeo de Madrid. El cambio radical llegó cuando aguas abiertas pasó a ser modalidad olímpica, entraron las becas ADO. Vi que podía dedicarme a ello". 

A partir del 2008 se produjo algo que fue determinante en la carrera de Kiko. "A partir del 2008 tampoco es que diera un salto a nivel físico, de forma. Lo que vas ganando experiencia y tácticamente aprendí a afrontar mejor las pruebas. Hasta 2008 me metía siempre en el grupo de delante, peleando todo, todas las boyas, era más impulsivo. A partir de ahí me volví más reservón, esperaba atrás, viéndolas venir y me guardaba para darlo todo en la última vuelta. 2009 fue un año malo de lesiones y llegué a Roma muy justo de forma para el Mundial. Hablando con mi entrenador decididmos guardar e intentar apretar al final y me fue genial, quedé séptimo". 

Una vida dedicada al agua, una pasión que le ha llevado a cumplir sus sueños más ambiciosos y que ha llenado varias páginas en la historia de nuestra federación en una modalidad preciosa como son las aguas abiertas.

Fotos: Imágenes de la carrera de Kiko Hervás, desde Pekín a Londres.