Un equipo de plata, un grupo humano de oro

Han llegado esta noche a Barcelona y a Madrid desde Ucrania, agotadas, pero con una medalla colgada en su cuello. Un equipo de plata sí, pero un grupo humano de oro que ha superado las dificultades deportivas y las otras, que han sido enormes en un Campeonato de Europa celebrado en una impronunciable ciudad ucraniana (Dneprodzerzhinsk) en la que el waterpolo junior femenino ha hecho historia.
En el grupo de Barajas, al que corresponde la imagen, llegaron algunas protagonistas españolas, en concreto seis, de este Europeo júnior lideradas por el seleccionador Claudio Camarena, un hombre vinculado al waterpolo madrileño desde toda la vida que ha visto recompensado con creces el duro trabajo de los últimos meses. España ha lidiado con grandes equipos y ha tenido respuesta frente a potencias como Grecia, Hungría o Italia, sólo cediendo en la final ante Rusia, donde hubo opciones al título durante los primeros minutos.


Además, las condiciones del país, Ucrania, no han sido todo lo buenas que cabía esperar -lo que se reflejaba perfectamente en las caras de los técnicos y jugadoras-, por lo que esta medalla acentúa más si cabe el histórico triunfo de un equipo que se ha sumado al carro de los éxitos del deporte español absoluto, júnior y de edades que estamos cosechando en los útlimos tiempos.


Los familiares esperaban entusiasmados a sus hijas, que han volado desde Ucrania vía Munich pero que ya están en casa saboreando algo muy especial y es que, con dos años de diferencia, el waterpolo femenino absoluto y júnior son hoy las actuales subcampeonas de Europa, evidente señal de un trabajo bien hecho que debe llevar a este deporte -en categoría femenina- a la culminación de poder disputar sus primeros Juegos Olímpicos en Londres 2012.