Real Federación Española de Natación
16/04/2008 alle 00:00
CENTENARIO DEL WATERPOLO ESPAÑOL - 30 julio 1948. TOMÁS BATALLÉ, PRIMER ÁRBITRO ESPAÑOL DE WATERPOLO QUE DIRIGE UN PARTIDO OLÍMPICO
Mucho se podría discutir sobre la consideración de “internacional” que durante muchos años se otorgó a los árbitros de waterpolo, porque hasta que la LEN y la FINA no proclamaron formalmente sus “listas oficiales”, todo era pura interpretación.
Pero lo que no se puede discutir es que Tomás Batallé Fresno fue el primer árbitro español de waterpolo que tuvo el honor de dirigir un partido en unos Juegos Olímpicos.
Lo hizo en Londres, el 30 de julio de 1948, en el encuentro Estados Unidos-Uruguay ganado (7-0) por los norteamericanos. I después, en el mismo torneo olímpico, aún arbitró tres partidos más dando lecciones de autoridad y dominio de las reglas de juego.
Tomás Batallé, que ya había “silbado” encuentros internacionales amistosos, iniciaba así el camino que le llevaría a ser considerado árbitro “Número 1” del Mundo pocos años después y a formar parte del Technical Water Polo Committee de la FINA, desde que fue elegido en Roma 1960 hasta Munich 1972 en que se despidió voluntariamente del cargo, dejando el camino abierto a otros colegiados que seguían sus pasos.
Todo un caso, el de Tomás Batallé, rey del aforismo popular, que se vanagloriaba de haber viajado por todo el mundo dominando tan sólo un idioma extranjero: el andorrano.
En la foto: Tomás Batallé Fresno, que se ganó a pulso la condición de árbitro internacional y el cargo que ocupó en el Comité Técnico de Waterpolo de la FINA durante 12 años (1960-1972).
Pero lo que no se puede discutir es que Tomás Batallé Fresno fue el primer árbitro español de waterpolo que tuvo el honor de dirigir un partido en unos Juegos Olímpicos.
Lo hizo en Londres, el 30 de julio de 1948, en el encuentro Estados Unidos-Uruguay ganado (7-0) por los norteamericanos. I después, en el mismo torneo olímpico, aún arbitró tres partidos más dando lecciones de autoridad y dominio de las reglas de juego.
Tomás Batallé, que ya había “silbado” encuentros internacionales amistosos, iniciaba así el camino que le llevaría a ser considerado árbitro “Número 1” del Mundo pocos años después y a formar parte del Technical Water Polo Committee de la FINA, desde que fue elegido en Roma 1960 hasta Munich 1972 en que se despidió voluntariamente del cargo, dejando el camino abierto a otros colegiados que seguían sus pasos.
Todo un caso, el de Tomás Batallé, rey del aforismo popular, que se vanagloriaba de haber viajado por todo el mundo dominando tan sólo un idioma extranjero: el andorrano.
En la foto: Tomás Batallé Fresno, que se ganó a pulso la condición de árbitro internacional y el cargo que ocupó en el Comité Técnico de Waterpolo de la FINA durante 12 años (1960-1972).