Real Federación Española de Natación
10/08/2016 alle 00:00
JJOO Mireia, a un jaque mate del oro olímpico
Después de ver ganar oros a dos colosos de la natación mundial, Katie Ledecky y Michael Phelps (20º), las semifinales de los 200 mariposa se presentaban como una oportunidad única para Mireia Belmonte en busca de su segunda medalla olímpica. En la primera no hubo sorpresas con las asiáticas dominando y en la segunda la australiana Madeline Groves, que salió como un cohete, fue la única rival de MB, que se siente poderosa en esta prueba. Un paso, a un solo paso de su segundo hito...
Estaba inquieta en la cámara de salida (de los horrores más bien) con sus cascos y concentrada, pero moviéndose. Salió la última a la bocana -nadaba en la calle reina- y rápidamente se puso en acción. Como siempre dejó hacer a la Groves, que tenía prisa por alejarse de la española desde la salida misma. Embutida en la cuarta plaza, la de Badalona pasó el hectómetro a 1.00.09, y en los siguientes 50 comenzó a engrasar la maquinaria.
CAZA AL "CANGURO"
Y no fue hasta la última piscina cuando volvió a la faena primordial, dar caza a la austral de gorro amarillo, que la tuvo a un segundo. Pero Mireia, cuando saca el colmillo, no nada, simplemente sube la cabeza, aprieta las piernas y palea como si de dos remos se tratasen sus brazos. Ahí es cuando luce el duro trabajo invernal de seco en banco móvil y demás soluciones gimnásticas en los CAR en busca de traducir la fuerza en velocidad.
Groves se inquietó tanto que la vio casi de igual a igual a 15 metros de la meta. Ya sea por efecto psicológico o qué, ambas sabían perfectamente que se estaban jugando ambas la calle 4 de la final, porque esta semi estaba siendo más rápida que la anterior. Ganó Groves (2.05.66) por los 2.06.06 de Mireia. Groves tocó y luego sonrió a la española pensando: "Mañana nos jugamos el oro tú y yo, chica".
Sí, Mireia está ante la oportunidad de su vida de alcanzar el sueño de los sueños, ser nada más y nada menos que campeona olímpica. Le queda una carrera, su tercer 200M, este miércoles a las 10.55 (03.55 en España) y tiene toda la ´pintaza´ de que va a ir a por él. La historia tiene nombre de mujer...
Rodrigo Gil-Sabio (Comunicación RFEN. Especial JJOO Río 2016). Foto: Mireia Belmonte, segunda marca para la final de 200 mariposa / EFE Prohibida su reproducción total o parcial
Estaba inquieta en la cámara de salida (de los horrores más bien) con sus cascos y concentrada, pero moviéndose. Salió la última a la bocana -nadaba en la calle reina- y rápidamente se puso en acción. Como siempre dejó hacer a la Groves, que tenía prisa por alejarse de la española desde la salida misma. Embutida en la cuarta plaza, la de Badalona pasó el hectómetro a 1.00.09, y en los siguientes 50 comenzó a engrasar la maquinaria.
CAZA AL "CANGURO"
Y no fue hasta la última piscina cuando volvió a la faena primordial, dar caza a la austral de gorro amarillo, que la tuvo a un segundo. Pero Mireia, cuando saca el colmillo, no nada, simplemente sube la cabeza, aprieta las piernas y palea como si de dos remos se tratasen sus brazos. Ahí es cuando luce el duro trabajo invernal de seco en banco móvil y demás soluciones gimnásticas en los CAR en busca de traducir la fuerza en velocidad.
Groves se inquietó tanto que la vio casi de igual a igual a 15 metros de la meta. Ya sea por efecto psicológico o qué, ambas sabían perfectamente que se estaban jugando ambas la calle 4 de la final, porque esta semi estaba siendo más rápida que la anterior. Ganó Groves (2.05.66) por los 2.06.06 de Mireia. Groves tocó y luego sonrió a la española pensando: "Mañana nos jugamos el oro tú y yo, chica".
Sí, Mireia está ante la oportunidad de su vida de alcanzar el sueño de los sueños, ser nada más y nada menos que campeona olímpica. Le queda una carrera, su tercer 200M, este miércoles a las 10.55 (03.55 en España) y tiene toda la ´pintaza´ de que va a ir a por él. La historia tiene nombre de mujer...
Rodrigo Gil-Sabio (Comunicación RFEN. Especial JJOO Río 2016). Foto: Mireia Belmonte, segunda marca para la final de 200 mariposa / EFE Prohibida su reproducción total o parcial