Real Federación Española de Natación
30/07/2017 às 00:00
Mireia se baña en plata en casa de Katinka
Salió con la toalla en la mano derecha, después se la puso por montera y se dispuso, en la calle 5, al mayúsculo reto de ganar a Katinka Hosszu en su casa y ante más de 15.000 enfervorizados húngaros. De locos. Nos contaba Mireia después de la carrera que "Katinka se daba un golpe en la pierna, yo otro y así" antes de empezar. Cuando sonó la bocina aquello parecía más un combate de boxeo que una carrera de natación. Hosszú salió poseída a por el oro...
Rodrigo Gil-Sabio (Comunicación RFEN Aquatics)
Enviado Especial Mundial FINA Budapest 2017
Mireia se contuvo en el primer 100, la mariposa, para tocar segunda tras Hosszu, que ya casi aventajaba en un segundo a la española. La Belmonte sabía que no tenía que cebarse con la magiar, llevada en volandas por una grada que ponía los pelos de punta.
En el segundo 100, el de la espalda, Mireia cedió un puesto ante el empuje de Ohashi por calle exterior. La japonesa tocaba en 2.11 y más retrasada Mireia. En la braza se complicaron aún más las cosas porque entró en escena la canadiense Pickrem y la nipona seguía arriba.
Pero Mireia tenía su as en la manga, su crol. Metió pies buscando a sus dos presas por detrás y ya tocó la última piscina segunda, por delante de sus dos rivales por la plata. El último 50 fue el de "piraña" Mireia destrozando rivales con una marcha más. Daba igual la congestión, los 15.000 gritando por Katinka o el color de la pintura del fondo. Mireia dijo, voy a ganar otra plata y si se descuida la de delante allá que voy. Apretó Pickrem (4.32.88), pero los 4.32.17 de Mireia valen una plata, la segunda del Mundial, y la tercera suya. Gran Mundial. Gracias, Mireia. Eres de otra pasta...
Foto: Mireia Belmonte luce su medalla para todos los aficionados de la Natación española / Nacho Escobar (Especial para RFEN)
Rodrigo Gil-Sabio (Comunicación RFEN Aquatics)
Enviado Especial Mundial FINA Budapest 2017
Mireia se contuvo en el primer 100, la mariposa, para tocar segunda tras Hosszu, que ya casi aventajaba en un segundo a la española. La Belmonte sabía que no tenía que cebarse con la magiar, llevada en volandas por una grada que ponía los pelos de punta.
En el segundo 100, el de la espalda, Mireia cedió un puesto ante el empuje de Ohashi por calle exterior. La japonesa tocaba en 2.11 y más retrasada Mireia. En la braza se complicaron aún más las cosas porque entró en escena la canadiense Pickrem y la nipona seguía arriba.
Pero Mireia tenía su as en la manga, su crol. Metió pies buscando a sus dos presas por detrás y ya tocó la última piscina segunda, por delante de sus dos rivales por la plata. El último 50 fue el de "piraña" Mireia destrozando rivales con una marcha más. Daba igual la congestión, los 15.000 gritando por Katinka o el color de la pintura del fondo. Mireia dijo, voy a ganar otra plata y si se descuida la de delante allá que voy. Apretó Pickrem (4.32.88), pero los 4.32.17 de Mireia valen una plata, la segunda del Mundial, y la tercera suya. Gran Mundial. Gracias, Mireia. Eres de otra pasta...
Foto: Mireia Belmonte luce su medalla para todos los aficionados de la Natación española / Nacho Escobar (Especial para RFEN)