HEMEROTECA | Barcelona'18, un punto de partida hacia un futuro ilusionante

Muchas veces no valoramos lo suficiente una hazaña hasta que no transcurren un par de años (o más) y lo miramos con la perspectiva que merece. Los ciclos en el deporte son tan reales como crueles y, probablemente, en el waterpolo eso aún es más descarado. Cada año hay una gran competición, la exigencia es máxima, los jugadores deben rendir con sus clubes y luego con sus equipos nacionales. Por no hablar de las horas de entrenamiento, el sacrificio y lo complicado que es llegar al profesionalismo. Es por eso que el componente de la pasión es tan importante. En este nuevo apartado de 'Hemeroteca' repasamos el significado y el simbolismo de la plata que logró nuestra selección masculina en Barcelona'18. El primer metal tras nueve años duros en los que incluso se había quedado por primera vez sin participar en un Mundial (2015). 

Para recordar la magnitud de esa competición charlamos con Miguel de Toro. El boya del Zodiac CN At. Barceloneta justo había debutado en una gran competición con España el verano anterior en Budapest. El Mundial de 2017 fue seguramente decepcionante a nivel de resultado (novena plaza final), pero para un equipo que recién comenzaba a formarse a las órdenes del nuevo seleccionador David Martín formaba parte de un proceso. Un proceso en el que Martín tenía toda la confianza del mundo depositada. Y así consiguió transmitírselo a sus chicos, a tenor de lo que ha venido después.

CONFIANZA A PESAR DE LO DE BUDAPEST

“Siempre hemos confiado en David, se ha ganado nuestra confianza desde el principio, desde un primer momento nos ha transmitido lo que queríamos. Nos prometió unos resultados en función de lo que íbamos a trabajar. Por eso que la novena plaza de Budapest’17 no nos alarmó porque confiábamos en el trabajo y en la evolución”, asegura De Toro, consolidado como pieza importante en el combinado nacional. 

A pesar de lo de Budapest, las sensaciones eran buenas antes de afrontar el campeonato: “Nuestras sensaciones eran bastante buenas porque veníamos de hacer plata en la Europa Cup y bronce en la Liga Mundial. Sabíamos que en ambas competiciones Serbia, Croacia o Hungría no habían llevado a su mejor equipo, pero si veíamos que estábamos creciendo mucho, estábamos cómodos. Queríamos aprovechar que jugábamos en casa para dar buenas sensaciones, pero sin presión”.

UN DUELO DURÍSIMO Y VITAL ANTE MONTENEGRO

España quedó encuadrada en el Grupo B con Malta, Francia y Montenegro. Victoria inicial cómoda ante los malteses por 4-21. “Siempre es bueno ganar en el debut para coger confianza y rodaje; y el partido duro del grupo, si puede ser el último, mejor. Quedamos primeros por diferencia de goles con Montenegro. Fue un encuentro muy duro, es una selección que siempre se nos atraganta por su estilo de juego, son parecidos a nosotros. Juegan muy bien en equipo”. Los de Martín vencieron a Francia (7-4) y empataron ante los balcánicos (7-7) en un duelo complicado de verdad. 

Primer paso importante dado. Con la primera plaza se evitaba España cruzarse con Serbia, Hungría y Croacia hasta una hipotética final. Grecia, el rival de cuartos “Ellos venían de ser como club campeones de Europa con Olympiacos, nos habíamos enfrentado en la Europa Cup y en torneos previos y los conocíamos bien. Les teníamos respeto, pero sabíamos que jugando en casa teníamos muchas opciones. En los dos primeros cuartos estuvimos ahí y en el cuarto sí que les endosamos un parcial que dejó casi sentenciado el partido. Fue un alivio". 

ITALIA, EL RIVAL HISTÓRICO SE CRUZABA EN SEMIS

Semifinales. Las posibilidades de medalla se abrían de verdad después de muchos años de estar lejos de aspirar a ellas. Italia se cruzaba antes de la gran final. “El partido de Italia ha sido de los más duros que hemos jugado. A pesar del buen inicio con 4-1, ellos se pusieron por delante, ya se sabe que entre los dos países siempre ha habido bastante pelea. Lo viví con una tensión brutal, se pusieron dos arriba en el último cuarto y desde esa jugada todas las acciones del periodo acaban en hombre de mas para ellos y las defendemos todas. Fue épico. Cuando se ponen dos arriba el equipo, lejos de venirnos abajo, nos juntamos y nos dijimos que había que reaccionar como fuera. Blai y Roger estuvieron muy acertados y luego el gol de Fran se va a recordar durante mucho tiempo”.

UNA FINAL QUE CATAPULTABA EL PROYECTO

Por fin la ansiada final. Las piscinas Picornell vibraban y se habían enganchando cada vez más a un equipo que no daba un balón por perdido, lleno de alma y muy bien trabajado. “Serbia en Budapest el año anterior nos había metido un buen correctivo. Sabíamos que por talento individual eran muy superiores a nosotros. Yo sinceramente era de los que creía que la final esaba bastante inclinada a su favor. Creo que ahí los capitanes del equipo, Felipe, Marc y Dani, estuvieron muy bien, nos animaron, nos dijeron que jugáramos sin presión. Cuando perdimos en la tanda de penaltis evidentemente estuvimos tristes, pero solo cinco minutos. A la que los capis nos recordaron todo lo que habíamos logrado, que llevábamos 10 años sin conseguir una medalla internacional, creo que subimos con una sonrisa en la cara, con nuestra familia en las gradas, fue emocionante".

Efectivamente, tras terminar el tiempo reglamentario 7-7 el mayor acierto en los penaltis delm experimentado conjunto serbio decantó la balanza (12-10). Pero ese duelo se convertía en la constatación de que algo grande de verdad estaba comenzando a asomar. El tiempo solo ha hecho que dar la razón a ello...

Revive la final entre España y Serbia en Barcelona:

https://www.youtube.com/watch?v=RKmVJD-IsHw

Fotos: Imágenes de un Europeo para el recuerdo en casa.