Real Federación Española de Natación
15/12/2010 an 00:00
Día de gloria para la Natación española en Dubai
Dos medallas de oro y dos finalistas fue lo que dio de sí uno de los días más grandes de la natación española. Porque no fue sólo la gesta de Miriea Belmonte y sus oros en los 200 mariposa y los 400 estilos, en ambos casos con récord de los campeonatos y, por si fuera poco, récord también de Europa en los 4 estilos (4.24.21) que tenía la británica Hannah Milley (4.24.51). Fue también la clasificación para finales de Aschwin Wildeboer y Merche Peris en los 100 espalda.
Mireia es una habitual de los podios y de ella siempre hay que esperar lo mejor. Pero en esta ocasión ha dado lo mejor de sí para hacerse con dos oros con los que sólo ella podía soñar y que parecía algo imposible. Más cuando en los 200 mariposa dobló el primer 50 la penúltima, en quinta posición los 100 metros y aún quinta al paso por los 150. Su fuerza terminal la hizo auparse a la primera plaza, batiendo el récord de los campeonatos y dejando sin medalla a la gran favorita, la húngara Katinka Hosszu, que había marcado el mejor tiempo en las semifinales. Al final, un oro con un crono de 2:03.59, récord de los campeonatos, a sólo 58 centésimas del récord nacional, lo que habla a las claras su perfecto estado de forma.
Sólo cuarenta minutos después nadaba los 400 estilos. Los más optimistas se podían conformar con una cuarta plaza, no en vano salía con la sexta marca de las ocho finslistas. Eso, el desgaste de la carrera anterior y el peso de la medalla al cuello que ya llevaba. No fue así. Nadó como nunca, de más a más, hasta alcanzar la posta de la braza en la que dio el golpe a la carrera para acabar controlando en el libre a la china Ye Shiwen, su única rival, porque la otra asiática Li Xuanxu, se hizo con el bronce a casi cincos egundos de la catalana. Y otro récord de los campeonatos. Y primer récord europeo que se bate en estos Mundiales (4:24.21). La anterior marca era de británica Hannah Milley, de hace justo un año (4:24.51).
Preguntada al borde de la piscina por los periodistas cómo había sido posible tamaña gesta, Mireia contestó con un lacónico "no losé". Sólo era momento de celebraciones.
Aschwin y Merche, a la final
Las gestas de Merche y Aschwin quedaron relegadas a un segundo plano, evidentemente, pero nada de eso les resta mérito ni valor. Aschwin se metió en la final del 100 espalda masculinos con un tiempo de 50.90. Nadó en la segunda semifinal y tenía como referencia bajar del 50.99 que marcaba la quinta marca de la primera. Aschwin fue de menos a más, pasando los 50 metros el quinto y remontando hasta la tercera plaza que a la postre le daba plaza en la final, con el mejor sexto registro de los ocho finalistas.
Luego le tocó a Merche Peris, en los 100 espalda femeninos, quien tras acceder a las semis con la decimocuarta marca no aparecía en los pronosticos para estar en la final. Lo hizo realmente bien, mandando en los 25 primero metros, doblando tercera en los 50 y acabando quinta de una serie rapidísima. En el cómputo de las dos carreras, octava plaza para la española y otro éxito para la delegación en un día de gloria como ha habido muy pocos.
Mañana, nueva presencia de Mireia en las series de la mañana, nadando en la séptima serie de los 100 estilos. Si se hace un hueco entre las 16 mejores, nadará nuevamente por la tarde. Tarde en la que Aschwin y Merche ya tienen su hueco en las dos finales del 100 espalda. ¿Alguien da más?
Mireia es una habitual de los podios y de ella siempre hay que esperar lo mejor. Pero en esta ocasión ha dado lo mejor de sí para hacerse con dos oros con los que sólo ella podía soñar y que parecía algo imposible. Más cuando en los 200 mariposa dobló el primer 50 la penúltima, en quinta posición los 100 metros y aún quinta al paso por los 150. Su fuerza terminal la hizo auparse a la primera plaza, batiendo el récord de los campeonatos y dejando sin medalla a la gran favorita, la húngara Katinka Hosszu, que había marcado el mejor tiempo en las semifinales. Al final, un oro con un crono de 2:03.59, récord de los campeonatos, a sólo 58 centésimas del récord nacional, lo que habla a las claras su perfecto estado de forma.
Sólo cuarenta minutos después nadaba los 400 estilos. Los más optimistas se podían conformar con una cuarta plaza, no en vano salía con la sexta marca de las ocho finslistas. Eso, el desgaste de la carrera anterior y el peso de la medalla al cuello que ya llevaba. No fue así. Nadó como nunca, de más a más, hasta alcanzar la posta de la braza en la que dio el golpe a la carrera para acabar controlando en el libre a la china Ye Shiwen, su única rival, porque la otra asiática Li Xuanxu, se hizo con el bronce a casi cincos egundos de la catalana. Y otro récord de los campeonatos. Y primer récord europeo que se bate en estos Mundiales (4:24.21). La anterior marca era de británica Hannah Milley, de hace justo un año (4:24.51).
Preguntada al borde de la piscina por los periodistas cómo había sido posible tamaña gesta, Mireia contestó con un lacónico "no losé". Sólo era momento de celebraciones.
Aschwin y Merche, a la final
Las gestas de Merche y Aschwin quedaron relegadas a un segundo plano, evidentemente, pero nada de eso les resta mérito ni valor. Aschwin se metió en la final del 100 espalda masculinos con un tiempo de 50.90. Nadó en la segunda semifinal y tenía como referencia bajar del 50.99 que marcaba la quinta marca de la primera. Aschwin fue de menos a más, pasando los 50 metros el quinto y remontando hasta la tercera plaza que a la postre le daba plaza en la final, con el mejor sexto registro de los ocho finalistas.
Luego le tocó a Merche Peris, en los 100 espalda femeninos, quien tras acceder a las semis con la decimocuarta marca no aparecía en los pronosticos para estar en la final. Lo hizo realmente bien, mandando en los 25 primero metros, doblando tercera en los 50 y acabando quinta de una serie rapidísima. En el cómputo de las dos carreras, octava plaza para la española y otro éxito para la delegación en un día de gloria como ha habido muy pocos.
Mañana, nueva presencia de Mireia en las series de la mañana, nadando en la séptima serie de los 100 estilos. Si se hace un hueco entre las 16 mejores, nadará nuevamente por la tarde. Tarde en la que Aschwin y Merche ya tienen su hueco en las dos finales del 100 espalda. ¿Alguien da más?
