SERIAL MEDALLISTAS: Barcelona'13 marcó el camino de un idilio mundial de nuestras mujeres
Tres medallas mundialistas en apenas ocho años. Un vínculo ya indestructible de nuestra selección nacional femenina con los Campeonatos del Mundo FINA. En tres de los últimos cuatro disputados, España ha alcanzado la final. Casi nada. Todo comenzó en casa, en Barcelona, en aquel histórico Mundial de 2013. Después de una plata para los anales de la historia en los Juegos Olímpicos de Londres, los primeros que disputaba el combinado femenino, las de Miki Oca lograron subirse a lo más alto del cajón ante unas piscinas de Montjuïc abarrotadas y entregadas.
Seis participaciones y una octava plaza como mejor calificación. Con estas credenciales llegaba España al primer Mundial que se disputaba, en casa, en el marco incomparable de las Picornell. No era un 'tapado', puesto que el equipo de Miki Oca venía de alcanzar la final de los Juegos en Londres, pero tampoco partía entre las favoritas. Un equipo muy joven, con las Anni Espar, Marta Bach o Roser Tarragó de apenas 20 años. Y las Laura Ester, Mati o Maica con 23.
LAS PISCINES BERNAT PICORNELL Y UN AMBIENTE ELÉCTRICO
Encuadrada en el Grupo A junto a Rusia, Países Bajos y Uzbekistán, España finalizó segunda tras vencer a neerlandesas y uzbekas y perder ante las rusas. Triunfo contundente ante Nueva Zelanda en octavos (18-6) y Estados Unidos se cruzaba en cuartos. Favoritísimo, el cuadro americano venía de no darnos opción en la final olímpica el año anterior. Las de Oca tuvieron su 'vendetta' con un 9-6 incontestable. Tras ese 'chute' de moral, triunfo trabajadísimo en semifinales ante Hungría y final ante Australia. Un ambientazo tremendo en las gradas barcelonesas que nos llevó en volandas al oro (6-8).
Tras ese oro, llegaba Kazan 2015. Ya como una de las grandes favoritas y tras el oro en el Europeo, la selección no terminó de encontrar nunca sensaciones y derrota en cuartos frente a una motivadísima Estados Unidos. Un pequeño 'borrón' en un historial inmaculado en esa segunda década de los 2000. Después de la séptima plaza, tocaba redimirse en Budapest'17.
DOS PLATAS, SOLO POR DETRÁS DE UN EQUIPO CASI INVENCIBLE
Y vaya si lo hicieron las de Oca. Con renovaciones, ya con jugadoras como Bea Ortiz consolidadas, las nuestras fueron segundas en fase de grupos, solo por detrás de Estados Unidos. Victorias ante China en octavos, Grecia en cuartos y Canadá en semifinales. En la final, el 'hueso' norteamericano se volvía a cruzar. No hubo nada que hacer. Pero que nadie nos quite el sabor de esa plata.
Mismo guión en 2019. Otro éxito rotundo alcanzando la gran final de Gwangju (Corea del Sur), pero Estados Unidos, un equipo de época casi indestructible, no daba opción. Budapest 2022 llega con aún más sabia nueva, con las Elena Ruiz, Martina Terré y compañía pisando fuerte.
Comunicación RFEN. Fotos: En portada, alegría desbordada de España tras su oro en nuestro Mundial de Barcelona 2013. Abajo, la última medalla -de color plata- en Gwangju 2019