SPLIT 2022 / Una infranqueable España defiende el bronce ante una desesperada Italia
¡Qué partidazo! El 1-1 de los España-Italia de este verano, se deshizo a favor de una infranqueable España, que cerró el castillo y tiró la llave al acantilado (7-6). Un bronce, con último golazo del gran capitán Felipe Perrone, con gran sabor para cerrar un verano espectacular, tres podios de tres, y con título mundial de Budapest 2022 como guinda a un pastel que nos dejado más que satisfechos. Los 15 de España han defendido la medalla con uñas y dientes (y algo más porque la dureza fue inenarrable) ¡Bravo, ESPAÑA!
Rodrigo Gil-Sabio (Comunicación RFEN. Enviado especial a Split-Croacia)
Ya la previa de la Federación Italiana de Natación se refería a la película '42 segundos' y la final España-Italia de Barcelona 92, señal de respeto a la historia de las dos selecciones y al presente de ambas escuadras. Italia nos ganó el primer balón del partido, presagiando una batalla muy dura. Se repetía la final de Budapest, pero esta vez en Split y por el bronce.
Empezó marcado, ‘de pivot’, Famera en la primera superioridad (1-0). Respondió Italia con un penalty perfectamente ejecutado por Dolce. Eran los primeros compases de partido. Después fue Bustos el que, tras un rechace de Del Lungo, uno de los mejores porteros del mundo, hacía el 2-1. Pero hasta los mejores echan un borrón y Barroso le tiró un manso que no pudo atajar. Con 3-1 se llegó al primer descanso.
Los de Campagna subieron un punto su intensidad defensiva, dado que en ataque no les salía nada (un gol en 11 minutos y de penalty). Pero Damonte, en una vaselina envenenada, ponía el segundo. Solo estaban a un gol aunque a remolque de una España a la que también le estaba costando mucho marcar. En estas, ajustó muy bien Canella arriba al palo largo para empatar en superioridad. Quedaban dos posesiones más para el descanso largo y al menos había que mantener la igualdad.
Psicológicamente, que Italia no se pusiera por delante era muy importante porque es un equipo que con el marcador y la corriente a favor alcanza un trance ganador difícil de anular. ‘Porca miseria’, es Italia. Y España lo sabía bien. Transitó el tercer cuarto con mucha igualdad hasta que Larumbe, en uno más y desde el extremo, nos volvía a poner por delante. Y Granados, en boca de gol, ponía un 5-3 que sabía a puro bronce. Quedaba mucho, 13 minutos, pero el ritmo lento del partido nos ponía en la ola buena. ¡Ojo, que Italia no había despertado!
Un Damonte muy eficaz puso el cuarto para una Italia un tanto desesperada con los brazos españoles y con Unai, lo más parecido a una fortaleza medieval sin puente y con cocodrilos incluídos. Había que seguir con la defensa, es decir, con el innegociable estilo 'caja fuerte' de David Martín. Campagna volvía a recurrir a algo más que defender, se entiende.
Último cuarto y dos arriba. Enseguida, un penalty para Italia -muy protestado por nuestro banquillo- y Di Fulvio que acorta a un solo gol a falta de 7 minutos largos para el epílogo ¡Qué emoción! Por tres, tres veces lanzó Tahull para triple rechace de Del Lungo y justo después, expulsión y empate de Lorenzo Bruni (6-6). Italia comenzaba su función… pero España, con un golazo de Perrone echándose al equipo y a toda España a las espaldas, cerraba el telón de la 'ópera' italiana. Arrivederci y hasta Fukuoka...
Fotos: España, en el podio y de júbilo en el banquillo tras una enorme medalla de bronce europea / (c) Deepbluemedia (Servicio especial para RFEN)
