Real Federación Española de Natación
05/06/2016 a las 00:00
Una cantera de cantidad, calidad e ilusión
La cantera de los Saltos en España está creciendo en cantidad, calidad e ilusión. Fruto de ello es la convocatoria de 7 saltadores para el Campeonato de Europa Júnior de Rijeka-CRO: 28Jun-3Jul. Cantidad porque hacía años no se lograban estas cifras; Calidad porque en el “templo” de Dresden demostraron que las finales –y hasta una medalla- no son una utopía; Ilusión porque la sensación de ganas de progreso colectivo está más presente que nunca, aunque sea este un deporte individual.
Paula Gilabert (CN Barcelona), Adrián Abadía y Matthew Wade (CS Mallorca), Carlos Camacho y Sara Lameiro (Real Canoe NC), y Héctor y Víctor Pérez (CDN SACOA) son los elegidos para disputar el Europeo Júnior en Croacia a finales de mes. Y no han sido elegidos al azar, ni mucho menos, seis de ellos estuvieron en final en el Meeting de Dresden, considerado un Europeo por los técnicos y donde incluso varias pruebas son del mismo nivel o mayor que un continental LEN.
FINALES Y EXPERIENCIA INTERNACIONAL
Hemos hablado de este apasasionante deporte con Donald Miranda, entrenador responsable RFEN para Rijeka, que nos ha comentado que el objetivo deportivo en Croacia no puede ser otro que “la presencia en finales y coger experiencia internacional. En Dresden, con 25 países más EEUU, Canadá, Japón y Australia, ya competimos en varias finales y con buenas prestaciones. Es verdad que las emociones son distintas, pero vamos a competir”.
Respecto al buen número de saltadores (7), nos dice que “hay una coincidencia de talentos. Siempre íbamos a estas competiciones con 3, 4, máximo 5 deportistas, ahora son 7 y eso ayuda mucho al sentimiento de equipo tanto en las concentraciones previas como en la competición. Aunque es un deporte individual, tiene un importante componente emocional respecto al sentimiento de grupo, de equipo, donde el compañerismo ayuda a mejorar la autoestima del colectivo y el orgullo por un buen resultado de un compañero/a”.
Un trabajo coral que se está haciendo desde el Área de Saltos de la RFEN -con Julián Llinàs como responsable de la misma- y que, para Miranda, es “clave, porque en la selección júnior hay chicos de los centros de tecnificación del país (Madrid, Barcelona y Baleares) más Canarias, con un grupo de técnicos –Chemi Gil, Beneharo Bonilla, Agustín Sánchez y el propio Donald Miranda- que están colaborando para construir, aportando cosas distintas cada uno. Chemi Gil, por citar un ejemplo, tiene el bagaje y la experiencia de cinco JJOO”.
BASE TÉCNICA SÓLIDA
También se está trabajando en una dinámica imprescindible como las bases técnicas en un momento y edad trascendental en su trayectoria deportiva: “Trabajamos la consistencia, es decir, en los momentos más difíciles de entrenamientos y competiciones una base técnica sólida hace que tengas en qué apoyarte. Además estamos buscando criterios técnicos compartidos entre los entrenadores: cuando corregimos un salto, no solo nos escucha el pupilo, también lo hacen sus compañeros y si las correcciones de los técnicos son comunes, el mismo mensaje se duplica, triplica, cuadriplica cada vez y se convierte en algo que va marcar el estilo de un equipo, como un código. Nos apoyamos en las bases técnicas no solo para mejorar sino para intentar evitar que salga el error importante, el salto fallido que te puede dejar fuera de una clasificación, un corte o una final. Por eso buscamos subir el nivel de la primera serie de saltos y meter consistencia en la segunda”.
Finaliza Donald Miranda remarcando algo que está cambiando. “En Dresden los demás equipos han venido a darnos la enhorabuena, diciendo ´qué bien, buenas finales y otro país en el podio´. Tan importante es el trabajo que hacemos como el ´cómo nos ven los demás países en competición´, y ahí estamos construyendo nuestro presente”. Un presente que, como decimos nosotros en el titular, nos ilusiona.
Rodrigo Gil-Sabio (Comunicación RFEN). Fotos: Concentración Júnior de España en el CAR y podio de Adrián Aabadía en Dresden / Área Saltos Rfen
Paula Gilabert (CN Barcelona), Adrián Abadía y Matthew Wade (CS Mallorca), Carlos Camacho y Sara Lameiro (Real Canoe NC), y Héctor y Víctor Pérez (CDN SACOA) son los elegidos para disputar el Europeo Júnior en Croacia a finales de mes. Y no han sido elegidos al azar, ni mucho menos, seis de ellos estuvieron en final en el Meeting de Dresden, considerado un Europeo por los técnicos y donde incluso varias pruebas son del mismo nivel o mayor que un continental LEN.
FINALES Y EXPERIENCIA INTERNACIONAL
Hemos hablado de este apasasionante deporte con Donald Miranda, entrenador responsable RFEN para Rijeka, que nos ha comentado que el objetivo deportivo en Croacia no puede ser otro que “la presencia en finales y coger experiencia internacional. En Dresden, con 25 países más EEUU, Canadá, Japón y Australia, ya competimos en varias finales y con buenas prestaciones. Es verdad que las emociones son distintas, pero vamos a competir”.
Respecto al buen número de saltadores (7), nos dice que “hay una coincidencia de talentos. Siempre íbamos a estas competiciones con 3, 4, máximo 5 deportistas, ahora son 7 y eso ayuda mucho al sentimiento de equipo tanto en las concentraciones previas como en la competición. Aunque es un deporte individual, tiene un importante componente emocional respecto al sentimiento de grupo, de equipo, donde el compañerismo ayuda a mejorar la autoestima del colectivo y el orgullo por un buen resultado de un compañero/a”.
Un trabajo coral que se está haciendo desde el Área de Saltos de la RFEN -con Julián Llinàs como responsable de la misma- y que, para Miranda, es “clave, porque en la selección júnior hay chicos de los centros de tecnificación del país (Madrid, Barcelona y Baleares) más Canarias, con un grupo de técnicos –Chemi Gil, Beneharo Bonilla, Agustín Sánchez y el propio Donald Miranda- que están colaborando para construir, aportando cosas distintas cada uno. Chemi Gil, por citar un ejemplo, tiene el bagaje y la experiencia de cinco JJOO”.
BASE TÉCNICA SÓLIDA
También se está trabajando en una dinámica imprescindible como las bases técnicas en un momento y edad trascendental en su trayectoria deportiva: “Trabajamos la consistencia, es decir, en los momentos más difíciles de entrenamientos y competiciones una base técnica sólida hace que tengas en qué apoyarte. Además estamos buscando criterios técnicos compartidos entre los entrenadores: cuando corregimos un salto, no solo nos escucha el pupilo, también lo hacen sus compañeros y si las correcciones de los técnicos son comunes, el mismo mensaje se duplica, triplica, cuadriplica cada vez y se convierte en algo que va marcar el estilo de un equipo, como un código. Nos apoyamos en las bases técnicas no solo para mejorar sino para intentar evitar que salga el error importante, el salto fallido que te puede dejar fuera de una clasificación, un corte o una final. Por eso buscamos subir el nivel de la primera serie de saltos y meter consistencia en la segunda”.
Finaliza Donald Miranda remarcando algo que está cambiando. “En Dresden los demás equipos han venido a darnos la enhorabuena, diciendo ´qué bien, buenas finales y otro país en el podio´. Tan importante es el trabajo que hacemos como el ´cómo nos ven los demás países en competición´, y ahí estamos construyendo nuestro presente”. Un presente que, como decimos nosotros en el titular, nos ilusiona.
Rodrigo Gil-Sabio (Comunicación RFEN). Fotos: Concentración Júnior de España en el CAR y podio de Adrián Aabadía en Dresden / Área Saltos Rfen
