BUDAPEST: ¡ESPAÑA, ORO DE LEY FEMENINO EN LA CUNA DE BUDAPEST!

El silencio en el autocar español camino del Duna Arèna se podía cortar. Todos y todas absolutamente concentrados. Miré por la ventana, al Danubio. Me pareció ver en el reflejo del agua una pelota que entraba en la portería y todos nos abrazábamos. Fue un flash que duró unos instantes… Dos horas después, me despertaba en el estadio magiar y confirmaba mis mejores presagios: 13-12 a Rusia. Una vez más, en Budapest, ¡¡¡¡ESPAÑA, CAMPEONA DE EUROPA!!!!

Rodrigo Gil-Sabio (Comunicación RFEN. Enviado especial a Budapest-Hungría)

Se antoja difícil escribir estas líneas por toda la carga emocional de este campeonato y, sobe todo, de esta final. Los adjetivos se acaban, o al menos se plasman y ahí quedan para la hemeroteca (la nube, para los más modernos). En cambio, los recuerdos perduran para siempre. Y esta es una historia que se recordará porque un grupo de amigas -muy profesionalizado, eso sí- fue capaz de seguir ganando medallas casi diez años después.

Rusia no lo puso nada fácil. De hecho, comenzó dominando un encuentro realmente complejo desde el punto de vista estratégico. Son dos equipos que se conocen muy bien. Y empezaron las hostilidades al minuto y medio con gol de Gorbunova. Pero Anni Espar, a la segunda, colocaba las tablas. A continuación, ‘látigo’ Tarragó nos ponía en ventaja en un disparo raso a más de 7 metros. Tremendo.

Pero dos contraataques de Karimova y Prokofyeva encendían las primeras alarmas en el banco español. Menos mal que Maica es un volcán en erupción en la boya y, con dos encima, ponía las tablas a menos de medio minuto para el primer descanso. Y Serzhantova, de rebotes, adelantaba a las ‘zarinas’ (3-4).

Pili Peña, la zurda de oro, salía a flote. Pero contestaba Soboleva. Había que empezar a cerrar la defensa. Demasiados goles para una final. Bea lo empataba, pero debíamos poner el muro porque la inercia de ir remontando no parecía el mejor consuelo. A Bea se le estaba calentando el brazo. Notición español y alerta rusa. Además, Maica estaba imparable en la boya y había que aprovecharlo (7-6, a 2.31 del descanso).

Tarragó adelantó 8-7 con un trallazo en superioridad pero Rusia lo contestaba todo y acabó firmando las tablas. No era buena cosa tampoco que Prokofyeva (8-9) viera puerta. Y Bersneva con su vaselina (8-10). El partido estaba raro, y lo poco que pasaba no era nada favorable. Maica sacaba la manguera, gran solución ante la falta de acierto del perímetro. Anni puso el 2-0 de parcial y nos quitó una losa de encima porque la dinámica era muy oscura. Tablas (10-10) a 8 minutos de saber el campeón (de lo otro ni hablamos).

Un rebote crucial de Clara Espar ponía a España por delante. Y una monumental Maica pobía el 12-10 en su casa, es decir en su zona de boya. Titánica. Quedaban 4 minutos y había que hacer más piña que nunca. Paula hacía casi la rúbrica y Rusia a la desesperada se acercaba a dos pero no había tiempo. El Danubio se tiñió de oro español…

FICHA TÉCNICA:

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Foto: España, en el podio de Buapest repleta de oro / (c)DeepBlueMediaPhoto (Prohibida su difusión sin el consentimiento del autor).