Nuestra legendaria nadadora Mari Paz Corominas, en las Jornadas Mujer y Deporte del COE

Mari Paz Corominas, la legendaria nadadora española y primera finalista olímpica -en 200 metros espalda en los JJOO de México 68-, fue la representante acuática este miércoles de las Jornadas Mujer y Deporte del Comité Olímpico Español (COE) con el apoyo de Iberdrola. El auditorio Alfredo Goyeneche de Madrid reunió a muchas de las grandes caras del deporte femenino español -Ruth Beitia, Lydia Lozano, Coral Bistuer, Mª José Rienda, Isabel Fernández...-, y entre ellas una Mari Paz que hace más de 50 años nos regaló una gesta en aquellos tiempos del ‘tecnicolor’.

Rodrigo Gil-Sabio (Comunicación RFEN). Fotos: (c) COE

Mari Paz tuvo una carrera deportiva corta, pero meteórica, entre 1964 y 1970. Nueve récords de España jalonaron su trayectoria en el ‘alto nivel’ y una final olímpica sorprendente, porque sus marcas no daban para tanto. A este máximo nivel fue una gran pionera, como cuenta ella misma: “Fuimos las pioneras y las que abrimos el camino en el primer momento. Estuve en Mexico 68 y mi clasificación fue en un campeonato de España. Aquel verano batí un récord de España que hacia tiempo nunca se había batido”.

Ella supo aprovechar como nadie todas las buenas pistas que le fue dejando el camino: “He tenido la suerte de tener una familia deportista y todo me ayudó. En 1964 tuvimos un entrenador holandés muy joven en Sabadell (Kees Oudegeest) y todo fue saliendo. Vino conmigo a los JJOO Pilar Von Carsten. Solicitamos ir un mes antes por la altura y tuve la suerte de entrar en una final olímpica. No me daba el tiempo y aquello fue algo histórico hace ya más de 50 años”.

También comentó Mari Paz que “en aquel momento -tras la final olímpica y la enorme repercusión en España- con 16 años no me di cuenta y con 18 tuve que elegir entre ser deportista o hacer una carrera. Elegí lo segundo. Fueron seis intensos años de natación, pero muy cortos”.

Sobre la etapa en EEUU con el mítico Doc Counsilman, “mi historia en Estados Unidos fue cortita. Viendo que había empezado mis estudios universitarios y que no podía compaginarlo con la natación de élite no profesional, lo experimenté una temporada con ayuda de Santiago Esteva, que habló con Doc. Teníamos allí nada menos que a Mark Spitz y otros campeones olímpicos. Allí estuve 6 meses y experimenté el alto nivel estadounidense. Entrenaba 12.000 metros diarios, era invierno y se me helaba el pelo porque no había secadores en los vestuarios y estaba en una residencia, sin hablar inglés. Luego en España llegué a batir nueve récords”.

Y nos dejó una anécdota sobre el traje español de la ceremonia de inauguración de aquellos JJOO: “En aquel momento, Samaranch, como presidente del Comité Olímpico Español, habló con mi madre, que a su vez contactó con Carmen Mir, una modista de Barcelona, que nos confeccionó un traje que por aquel entonces (1968) era una preciosidad”.

Mari Paz Corominas, gracias por abrir barreras.