Real Federación Española de Natación
12/06/2014 at 00:00
Andrea Blas: "Necesito ir cogiendo ritmo"
Andrea Blas es una luchadora. No solo porque en el pasado Europeo sufrió una luxación en el hombro y siguió jugando el partido y su actuación fuera importantísima para levantar el título de campeonas, sino porque en su mente siempre está ofrecer más de sí misma, recuperarse cuanto antes y ayudar a sus compañeras. Cuatro meses después de la lesión sufrida en el Europeo, la jugadora de la Escuela Wat. Zaragoza reapareció el pasado fin de semana.
Ni mucho menos se encuentra al 100%, pero no aguantaba más ver los partidos detrás de la barrera y a la mínima que el médico le dijo que podía empezar a probar pero sin forzar la máquina no se lo pensó dos veces: “La semana pasada jugué ya unos minutitos, pero poco a poco necesito ir cogiendo ritmo de partido”, comenta la jugadora maña, contenta por volver a las piscinas.
Andrea demostró una implicación y una fuerza encomiables cuando, después de sufrir una dolorosa luxación de hombro en la primera parte de la final del Europeo contra Holanda, siguió jugando y siendo clave para la victoria: “Noté un desgarro en el momento. Seguí jugando un par de minutos hasta que ya no pude más y me sacaron del agua. El médico me lo colocó y pese a que sufrir aún algo de dolor quise seguir jugando. La ocasión lo merecía”. Blas marcó dos goles para colaborar decisivamente en el 10-5 final con el que saldaron las nuestras el partido.
CON GANAS DE VOLVER
Desde aquel maravilloso día han pasado casi cuatro meses. Cuatro meses en los que Andrea se ha dedicado a recuperarse y a rehabilitar la zona maltrecha y a recuperar la fuerza en la musculatura: “Al día siguiente no podía casi ni mover el hombro; esperé a llegar a Zaragoza para tratarme. La verdad es que no me arrepiento para nada de haber forzado aquel día”, afirma la boya zaragozana.
Contra el CN Terrassa reapareció. Marcó dos goles, pero comenta que aún sintió alguna pequeña molestia y es por eso que de momento no quiere forzar la máquina: “En el primer gol que marqué de revés me molestó un poquito, pero sobre todo me noté falta de ritmo competitivo y quizás el tener la musculatura poco trabajada. Espero estar al 100% de cara a la segunda vuelta”.
Respecto a la marcha del equipo, que es último con el casillero de puntos aún por estrenar, Blas tiene fe en revertir la situación: “Espero estar a tope ya para poder ayudar al equipo. Creo que podemos mantenernos y que iremos a más. Es difícil pero no imposible”. Respecto a su vuelta a la selección, Andrea asegura que ha hablado recientemente con el seleccionador, Miki Oca, quien le ha deseado que vaya poco a poco cogiendo el ritmo para empezar a contar con ella de nuevo.
“Miki me comentó que de momento siga descansando y que ya iremos viendo. Jugar a nivel internacional es otra historia, las cubreboyas que me puedan marcar serán seguramente más duras y me exigirán más físicamente por lo que tengo que estar bien preparada”, asevera la waterpolista maña, que lleva más de 16 años en la Escuela Wat. Zaragoza.
Puede sorprender que Andrea, una jugadora de nivel internacional, siga en las filas de su club de toda la vida, la EWZ, pero ella tiene muy claro por qué quiere seguir defendiendo los colores del conjunto aragonés: “Es mi casa, es donde estoy a gusto, he tenido ofertas, pero he preferido quedarme aquí, en el equipo de toda la vida e intentar ayudar con lo que pueda”.
Sergi Capdevila (Comunicación RFEN). Fotos: 1) Andrea en una imagen con su club (RPS 14). 2) Andrea junto a sus compañeras y al seleccionador español en Budapest / RFEN
Ni mucho menos se encuentra al 100%, pero no aguantaba más ver los partidos detrás de la barrera y a la mínima que el médico le dijo que podía empezar a probar pero sin forzar la máquina no se lo pensó dos veces: “La semana pasada jugué ya unos minutitos, pero poco a poco necesito ir cogiendo ritmo de partido”, comenta la jugadora maña, contenta por volver a las piscinas.
Andrea demostró una implicación y una fuerza encomiables cuando, después de sufrir una dolorosa luxación de hombro en la primera parte de la final del Europeo contra Holanda, siguió jugando y siendo clave para la victoria: “Noté un desgarro en el momento. Seguí jugando un par de minutos hasta que ya no pude más y me sacaron del agua. El médico me lo colocó y pese a que sufrir aún algo de dolor quise seguir jugando. La ocasión lo merecía”. Blas marcó dos goles para colaborar decisivamente en el 10-5 final con el que saldaron las nuestras el partido.
CON GANAS DE VOLVER
Desde aquel maravilloso día han pasado casi cuatro meses. Cuatro meses en los que Andrea se ha dedicado a recuperarse y a rehabilitar la zona maltrecha y a recuperar la fuerza en la musculatura: “Al día siguiente no podía casi ni mover el hombro; esperé a llegar a Zaragoza para tratarme. La verdad es que no me arrepiento para nada de haber forzado aquel día”, afirma la boya zaragozana.
Contra el CN Terrassa reapareció. Marcó dos goles, pero comenta que aún sintió alguna pequeña molestia y es por eso que de momento no quiere forzar la máquina: “En el primer gol que marqué de revés me molestó un poquito, pero sobre todo me noté falta de ritmo competitivo y quizás el tener la musculatura poco trabajada. Espero estar al 100% de cara a la segunda vuelta”.
Respecto a la marcha del equipo, que es último con el casillero de puntos aún por estrenar, Blas tiene fe en revertir la situación: “Espero estar a tope ya para poder ayudar al equipo. Creo que podemos mantenernos y que iremos a más. Es difícil pero no imposible”. Respecto a su vuelta a la selección, Andrea asegura que ha hablado recientemente con el seleccionador, Miki Oca, quien le ha deseado que vaya poco a poco cogiendo el ritmo para empezar a contar con ella de nuevo.
“Miki me comentó que de momento siga descansando y que ya iremos viendo. Jugar a nivel internacional es otra historia, las cubreboyas que me puedan marcar serán seguramente más duras y me exigirán más físicamente por lo que tengo que estar bien preparada”, asevera la waterpolista maña, que lleva más de 16 años en la Escuela Wat. Zaragoza.
Puede sorprender que Andrea, una jugadora de nivel internacional, siga en las filas de su club de toda la vida, la EWZ, pero ella tiene muy claro por qué quiere seguir defendiendo los colores del conjunto aragonés: “Es mi casa, es donde estoy a gusto, he tenido ofertas, pero he preferido quedarme aquí, en el equipo de toda la vida e intentar ayudar con lo que pueda”.
Sergi Capdevila (Comunicación RFEN). Fotos: 1) Andrea en una imagen con su club (RPS 14). 2) Andrea junto a sus compañeras y al seleccionador español en Budapest / RFEN
